La impresión digital gana terreno al offset

En la actualidad existen dos grandes tecnologías de impresión: offset y digital. Obviamente, cada una de ellas tiene sus ventajas e inconvenientes o, mejor dicho, puntos fuertes y débiles. Para situarnos, repasaremos a grandes rasgos las principales características de ambas.

La impresión offset emplea tinta líquida, planchas metálicas y una maquinaria compleja para la transmisión de la tinta al papel. El tamaño de las máquinas varía en función del soporte empleado. Para pasar desde el diseño en el ordenador al papel se deben seguir diversos procesos.

Esta tecnología es capaz de conseguir un elevado volumen de producción en poco tiempo y con una gran calidad. Como contrapartida, el offset conlleva unos costes elevados debido a la compleja maquinaria de engranajes y rodillos necesaria, además de ser menos flexible.

Por su parte, la impresión digital se divide en dos tecnologías: el inkjet (inyección de tinta líquida) y el tóner (partículas con pigmento). Los dispositivos de digital printing utilizan las cargas eléctricas para imprimir en el papel y lo hacen directamente desde el ordenador.

Las impresoras digitales son en general de tamaño más reducido y son ideales para tiradas medias y cortas. Por lo tanto, requieren una inversión mucho menor. Su calidad de impresión ha mejorado notablemente y hoy en día pueden rivalizar con el offset. Asimismo, otra de sus grandes ventajas sobre el offset es la mayor capacidad de personalización que ofrecen.

Teniendo en cuenta las características de una y otra tecnología, para cada proyecto concreto puede ser más conveniente una u otra. De todas formas, en la actualidad la gran mayoría de usuarios encontrarán muchas más ventajas en la impresión digital, que sigue ganando terreno al offset.

Además, las prensas digitales más avanzadas pueden realizar también trabajos complejos con enorme rapidez y calidad. El mejor ejemplo de ello son equipos Xerox como las polivalentes Versant 180 o Versant 3100, o las más complejas Trivor 2400, Rialto 900 o iGen5, entre otros muchos. Versatilidad, costes contenidos, fiabilidad o amplias posibilidades de configuración son algunas otras de las ventajas de estos productos distribuidos por Soficat.