Los seres humanos generamos unos 57,4 millones de toneladas métricas de basura electrónica, es decir, más que el peso del mayor objeto artificial del mundo, la Gran Muralla china, según denunció el Foro WEEE de productores ecológicos.
En 1 millón de teléfonos móviles, hay incrustados 24 kilos de oro, 16.000 kilos de cobre, 350 kilos de plata y 14 kilos de paladio, recursos que podrían recuperarse y devolverse al ciclo de producción sin necesidad de extraer nuevas materias primas que, en cualquier caso, genera más CO₂ que el reciclaje.
El director general del Foro WEEE, Pascal Leroy, apeló a la responsabilidad individual para deshacerse de los aparatos electrónicos en desuso, de forma que puedan ser reciclados.
Aparte de ello,un equipo de la Universidad de Rice ha puesto en práctica un método que permite extraer metales preciosos de la basura electrónica. Según explican los investigadores, este proceso emplearía hasta 500 veces menos energía que los que se usan actualmente en laboratorio y sería respetuoso con las tierras agrícolas.
Este procedimiento se denomina “calentamiento Joule”. A través de este método, se pueden recuperar elementos como el rodio, paladio, oro y plata con el fin de ser reutilizados. Según Nature Communications, el calentamiento Joule permite eliminar los metales pesados altamente tóxicos y dejar un subproducto con un contenido mínimo de metal.
En Soficat, estamos comprometidos con el medio ambiente, y ya desde hace algunos años tenemos un programa de reciclaje en una planta de flagmentación y recuperación homologado; “Soficat Zeroxcusas”.
Todos nuestros clientes pueden enviar el material desechable e incluso impresoras, copiadoras, o equipos tecnológicos para su tratamiento.