En un mundo cada vez más conectado las empresas necesitan transformar su modelo de negocio para aprovechar las nuevas tecnologías y la innovación para mejorar la experiencia del cliente y la relación con los socios.
Cada década surge una nueva generación de personas con actitudes, intereses y valores diferentes, y las empresas necesitan ajustar su modelo si quieren asimilar adecuadamente trabajadores y clientes de diferentes generaciones.
Los expertos creen que la búsqueda de un legado que genere resultados y el creciente movimiento del capitalismo consciente refuerzan la tendencia de que las empresas con propósito serán las más exitosas. A medida que aumenta la esperanza de vida y los profesionales permanecen más tiempo en el mercado laboral, la capacidad para gestionar equipos más diversificados se convierte en un factor más crítico para el negocio.
Para seguir avanzando hacia el futuro las empresas necesitan estar preparadas para los constantes cambios que se producen a todos los niveles, y la formación de su personal es clave para lograrlo.
Los expertos consideran fundamental poder localizar profesionales que dominen las habilidades emocionales y de gestión que se necesitan, ya que en muchas ocasiones la organización no cuenta con personal capacitado para trabajar con nuevas tecnologías o modelos comerciales.
Startup es una percepción empresarial, en un contexto de innovación temprana, que crea productos/servicios de la mano del usuario a gran velocidad. La tecnología le permite experimentar de manera constante para encontrar una idea escalable en el mercado y así impactar la vida de muchas personas.
Una de las grandes ventajas que tienen las startups es que cuentan con una gran flexibilidad para cambiar sus prácticas, políticas y procesos, lo que les permite corregir su rumbo para adaptarse a nuevas situaciones. Esto se logra alineando a personas, procesos, proyectos, decisiones y departamentos para trabajar en pos de una mayor agilidad, una mentalidad que otras empresas deberían adoptar para ser más capaces de abordar las necesidades futuras sin verse limitados por la rigidez de las estructuras organizativas tradicionales.