Elon Musk se gastó 2.900 millones de dólares para convertirse en el mayor accionista de su red social preferida, Twitter. Actualmente ya no es solo eso sino que Elon Musk ya es dueño de Twitter.
Twitter fue creado en 2006 como una plataforma abierta en la que sus usuarios pueden escribir mensajes o tuits de 280 caracteres como máximo (originalmente eran 140 caracteres). En la actualidad tiene más de 400 millones de usuarios, según los datos más recientes de Statista.
Aunque no es una de las redes más populares (Facebook tiene cerca de 3.000 millones de usuarios, por ejemplo), los temas que se debaten en esta aplicación tienen una gran difusión en los medios de comunicación. Muchos gobiernos, instituciones y personajes famosos utilizan Twitter como plataforma para hacer comunicados públicos.
El multimillonario, CEO ya de Tesla y SpaceX, ha acordado la compra de una de las principales redes sociales por más de 44.000 millones de dólares. Tras las reticencias de la junta directiva de Twitter, cada accionista recibirá 54,20 dólares por cada acción ordinaria que posean al cierre de la transacción.
Los acontecimientos han ido muy rápido, y desde aquel movimiento se han sucedido las noticias, movimientos y debates en torno a una posibilidad que ahora ha cristalizado. Comienza una nueva era en Twitter. Una que, si hacemos caso a los comentarios de Musk, será muy distinta a la actual.
Elon Musk lleva años siendo uno de los usuarios más activos en Twitter. Su enorme base de seguidores, 83,3 millones en estos momentos, y hace tiempo que Musk utiliza Twitter de forma indiscriminada.
Su actividad ha sido frecuente, y entre sus mensajes siempre ha habido algunos dirigidos a Twitter como plataforma, para Musk parecía claro que Twitter tenía un gran potencial desaprovechado, pero ha sido ahora cuando ha decidido tratar de hacer algo para cambiar las cosas.