Que nuestra sociedad vive hiperconectada no es ningún secreto. Sólo hace falta moverse por la calle, el transporte público o un centro comercial, para darse cuenta de que estamos pendientes, en todo momento, de todo aquello que nos puede llegar vía nuestro teléfono móvil. Este fenómeno irá cada día a más con la llegada de la tercera revolución de las comunicaciones móviles, prevista para 2020 con la llegada de la tecnología 5G.
Un poco antes, en 2019, se espera que el 90% de la flota de aviones de IAG, propietaria de British Airways e Ibera, ofrezca Wi-Fi a sus pasajeros en los vuelos de larga distancia. Por aquel entonces ya será habitual contar con conexión en los vuelos cortos, pues según anunció la misma IAG el acuerdo alcanzado con la firma de satélites Inmarsat dotará de Wi-Fi a partir de este próximo verano a los aviones de sus compañías, Vueling entre otras.
Este hecho hará posible que un pasajero de un vuelo entre Barcelona y Madrid, por ejemplo, se conecte a la red inalámbrica de la compañía en pleno vuelo y mande a imprimir sus documentos al equipo multifunción Xerox con tecnología ConnectKey de la oficina de destino. Para ello sólo necesitará disponer de su móvil, pues con este sistema la movilidad y el hecho de no disponer de ordenador no es ningún problema.
Hacer realidad este proceso ya es posible desde hace unos años, aunque el Wi-Fi en los aviones no está demasiado extendido. La compañía nórdica Norwegian lo viene ofreciendo desde 2011, mientras que Lufthansa empezó a hacerlo justamente el mes pasado.